"Mañana" es la palabra más hermosa de esta noche.
He llegado a La Lloma sin más novedades que las previstas: el atasco de salida, la tormenta y aguacero de Alarcón, una parada para repostar...
Estoy cansado, pero mañana madrugaré más que nadie para ver cómo sale el sol recién bañado en el mar. Y recordaré a San Josemaría, que hizo también su oración en esta terraza contemplando el mismo amanecer hace cuarenta años.
Mañana a las 8 diré Misa en el altar de San José.
Mañana. Hoy solo puedo dar gracias por haber vuelto.
0 comments:
Post a Comment